No es necesario tener conocimientos de este idioma. Sin embargo, indudablemente, para sacar el mayor partido a la experiencia deportivo-lingüístico-socio-cultural, cuanto más alto sea el conocimiento de esta lengua, mejor.
Uno de los principales objetivos del programa es la mejora en la capacidad comunicativa en ese idioma. Para ello, Se participa de manera integrada como un jugador americano más. Enseñanza, compañeros, rivales y entorno en inglés. En algunos casos, entre más de 800 jugadores americanos, muchos de ellos de la misma edad que los inscritos en IBC. Con el objetivo común de jugar bien y ganar partidos.
El participante es introducido en un entorno conocido: el mundo del baloncesto; con jugadores compañeros y rivales de su misma edad o similar, con inquietudes y filosofías de vida muy parecidas, con objetivos comunes dentro del equipo, con entrenadores muy profesionales y preocupados por el bienestar del deportista y por su mejora en el mundo del baloncesto. Además, recibe charlas, ve vídeos, se empapa de la vida americana, conoce gente variopinta de aquel país,… Y, todo ello, en inglés. O sea, que siempre se aprende ¡y mucho!